El verano se ha convertido en una de las estaciones del año más delicadas para nuestra salud bucodental, debido a que descuidamos hábitos alimenticios y no mantenemos una higiene oral suficiente, según nuestra experiencia con pacientes. Así que vamos a conocer las mejores prácticas para cuidar la salud bucal en tus vacaciones.
Cepillado más exhaustivo
El verano aumenta la acumulación de placa bacteriana y empeora la salud gingival, porque el cepillado es menos frecuente debido a los cambios de horarios y vacaciones.
Aunque no se pueda realizar el cepillado después de cada comida, es necesario que se haga después del desayuno y la cena durante dos minutos.
Ingesta frecuente de agua
Durante las vacaciones se beben más bebidas alcohólicas y consumo de tabaco, por lo que empeora la halitosis. Así, que es muy importante beber frecuentemente agua para hidratar la mucosa oral.
Reducir el consumo de bebidas ácidas
El calor pide que bebamos refrescos, vino blanco, bebidas isotónicas o energéticas, cerveza, gazpacho… Esto propicia el empeoramiento de la sensibilidad dental. Por lo que es recomendable disminuir y controlar el consumo de estas bebidas, especialmente si se toman aisladas.
¡No olvides tus férulas!
Cuidado con los viajes, no te dejes las férulas en casa. Es imprescindible mantener un control de tu tratamiento de ortodoncia, especialmente si tienes alineadores transparentes.